Arcángel en el Gran Teatro de Córdoba

ARCÁNGEL: «Hay que adaptar las letras flamencas a los tiempos que corren»

Su espíritu vanguardista y su decidida apuesta por la renovación del flamenco es alabada y criticada por amplios sectores de la afición. Defensor de la tradición como punto de partida esencial para la renovación de los cánones flamencos, Arcángel (Huelva, 1977) mantiene firme su propósito de “buscar un equilibrio entre la tradición y lo vanguardista”. Sobre ese difícil terreno ha autoproducido su último disco ‘Quijote de los Sueños’ y ha fusionado música barroca y flamenco en el espectáculo ‘Las idas y las vueltas’, dos trabajos colmados de nuevos matices que muestran la amplitud de miras del cantaor onubense. Admirado y querido por la afición cordobesa, Arcángel llega el jueves 22 de diciembre al Gran Teatro como principal figura de la Gala de Navidad 2011 que promueve la Cátedra de Flamencología de Córdoba, un recital en el que estará acompañado a la guitarra por Miguel Ángel Cortés y en el compartirá cartel con el bailaor cordobés Dani Navarro y el guitarrista Javier Conde.

– ‘Quijote de los Sueños’ es el primer trabajo que autoproduce, ¿cómo valora la experiencia?
– Ha sido positiva, porque he podido hacer en este disco todo lo que pretendía. He cantado la música que me ha parecido, he contado con los músicos que he querido y, en definitiva, ha sido la manera de demostrar lo que yo entiendo por cante flamenco.

-¿Cree que las discográficas encorsetan a menudo la libertad creadora de los artistas?
– Más que a las discográficas, esto se debe al momento comercial que vivimos, porque se intenta que los discos sean vendibles y entendibles por un público que no sea estrictamente flamenco. Creo que esto no es ni malo ni bueno. Cada uno tiene que hacer su propuesta, lo que cada uno quiere en cada momento, aunque es inevitable estar sujeto a unas coordenadas comerciales. Tenemos que hacer un producto que esté en consonancia con los tiempos que corren, pero eso no significa que haya que renunciar a hacer lo que a uno le gusta.

– ¿Cómo está siendo la respuesta del público a su nuevo disco?
– Para mí es complicado hablar de esto porque no tengo vía directa con el público ni creo que deba ser yo quien deba valorarlo. Solo espero que haya sido un disco que haya interesado al público y que hayan visto una propuesta personal y distinta a mis discos anteriores, acorde con lo que suelo dar de sí en mis directos.

 


«Buscar un equilibrio entre la tradición y lo vanguardista es el camino que me he marcado»


 

– ¿Cree que hay que renovar las letras flamencas?
– Sí, pienso que el flamenco necesita nuevas letras, porque hay que adaptarlas a los tiempos que corren. El flamenco popular tiene letras atemporales y trascendentales, pero mi necesidad personal es la de cantar estos temas de otra manera.

– Ha fusionado flamenco y música barroca en el espectáculo ‘Las idas y las vueltas’ y frecuentemente colabora con otros artistas que nada tienen que ver con el flamenco, ¿Debe haber un equilibro entre la tradición y la experimentación en el flamenco?
– Esa es mi biblia. Buscar un equilibrio entre la tradición y lo vanguardista es el camino que me he marcado, porque así es como entiendo yo el mundo de la música. Respeto la tradición, la defiendo y la comparto, pero no puedo dejar de tener una visión hacia el futuro. Me gusta moverme respetando ambos mundos. Otra cosa es que consiga o no que ese equilibrio sea el justo. En la búsqueda estoy y en ese camino es el que quiero desarrollar mi carrera y mis inquietudes.

– ¿Qué consecuencias tiene para usted apostar por la renovación del flamenco?
– Tiene el coste de que no se entienda bien lo que uno quiere transmitir y de que los sectores más tradicionales de la afición a veces no estén de acuerdo con lo que uno hace. Sin embargo, la recompensa la encuentro en que puedo hacer lo que me gusta y demostrar cómo yo veo el flamenco, además de llegar a otra gente que antes no se había sentido interesada por este arte.

 


«Si sometemos el flamenco a la disciplina de otras músicas que no tienen el mismo espíritu, no le estamos haciendo un favor al flamenco, sino más bien lo contrario»


 

– Ahora que el flamenco es Patrimonio de la Humanidad, las Administraciones pretenden que esté presente en el sistema educativo e incluso en todos los conservatorios, ¿cree que la institucionalización del arte flamenco es positiva?
– Es positiva, pero siempre y cuando se haga bien y se respete la idiosincracia que tiene el flamenco. A mí me parece bien que el flamenco esté presente en el sistema educativo, que es algo que debería haberse hecho hace ya mucho tiempo. Sin embargo, no creo que sea tan positivo que, cuando el flamenco se imparta en los conservatorios, las coordenadas que se empleen en los métodos de aprendizaje atiendan más a estilos como la música clásica, que no tiene que ver nada con el flamenco. Habría que intentar desarrollar un método que, si bien debería ser universal para que todo el mundo pueda tener acceso a él, debe partir desde el propio flamenco. Si sometemos el flamenco a la disciplina de otras músicas que no tienen el mismo espíritu, no le estamos haciendo un favor al flamenco, sino más bien lo contrario.  

– ¿Cómo se siente cuando canta frente a la afición de Córdoba?
– Me siento muy a gusto, porque es una afición y una ciudad con la que me unen bastantes lazos. Tengo muchos amigos y compañeros en Córdoba. Vicente Amigo, ‘El Pele, José Antonio Rodríguez, ‘El Tomate’ y otros muchos artistas de cordobeses son muy especiales para mí. Además, Córdoba es una tierra que siempre me ha tratado muy bien y me ha dado mucho cariño y ese cariño es el que yo quiero devolver cada vez que aparezco por allí.

 


«Córdoba es una tierra muy flamenca, que cuenta con mucha gente con un peso específico dentro del mundo del flamenco»


 

– ¿Cuál de los cantaores de Córdoba le ha servido cómo referente?
– Sin duda, Antonio Fernández Díaz ‘Fosforito’, Luis de Córdoba y ‘El Pele’ han sido a mi entender los más sobresalientes. Aunque hay otros como ‘El Séneca’, Rafael Ordóñez o Julián Estrada, a los que también aprecio mucho. Creo que Córdoba es una tierra muy flamenca, que cuenta con mucha gente con un peso específico dentro del mundo del flamenco.

-¿Cuéntenos cuáles son sus próximos proyectos?
– Ahora mismo voy a seguir con la promoción de ‘Quijote de los sueños’ para tratar de que el disco se vaya conociendo y podamos representarlo en directo. Y, en relación al espectáculo ‘Las idas y las vueltas’ de flamenco barroco, ya tenemos cerradas actuaciones en Alemania y Suiza, a parte de las representaciones que ya se han hecho en España. Este es un proyecto que me ilusiona mucho y creo que hemos logrado hacer un verdadero diálogo entre ambas músicas.

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