BERNARDO MIRANDA GANA EL CONCURSO DE CANTE DEL ATENEO

Lleno absoluto el que se registró en el salón Julio Romero de Torres del Círculo de la Amistad, donde el pasado miércoles tuvo lugar la final del I Premio ‘Agustín Gómez’ de Flamenco organizado por el Ateneo de Córdoba. Y es que era mucha la expectación por ver sobre las tablas a los jóvenes talentos del cante, que en líneas generales habían dejado muy buenas sensaciones entre los aficionados a lo jondo que se dieron cita en las cuatro fases de selección previas a la final que tuvieron lugar el mes pasado en la Peña Flamenca ‘El Rincón del Cante’. Un galardón que, en última instancia, el jurado del certamen resolvía tras una ardua deliberación otorgando el premio absoluto al cantaor Benardo Miranda, natural de Fernán Núñez y ganador del último Certamen Andaluz de Jóvenes Flamencos ‘Desencaja’, que continúa imparable su ascendente trayectoria artística.

De los treinta participantes que ha registrado la primera edición del concurso, solamente cinco disputaron la final, una fase en la que cada uno de ellos hubo de interpretar tres cantes y que se prolongó hasta pasada la medianoche. El lucentino Felipe Jesús Fernández fue el encargado de abrir la serie de recitales junto a la guitarra oficial del certamen de Rafael Trenas. Y lo hizo arrancando por marianas, un palo que el joven continuó por peteneras y seguiriyas logrando cuajar una actuación muy aplaudida por el respetable. Malagueñas, serranas y cantiñas fue el repertorio escogido por la cantaora Lucía Leiva, que demostró una vez más la buena sintonía que encuentra con la guitarra de José Tomás Jiménez, reciente ganador del primer premio de guitarra de concierto del X Certamen de Jóvenes Flamencos de la Diputación de Córdoba.

Llegados al ecuador de la final fue el turno del ganador, Bernardo Miranda, que se empleó a fondo con una serie de tonás y estuvo arropado por la guitarra de su paisano Juan Marín ‘El Juani’ en las malagueñas con remate por abandolaos y las alegrías que sirvieron de cierre a su magistral actuación. Rocío de Dios, que llegaba a la final como flamante ganadora en la modalidad de cante del certamen de la Diputación, hizo lo propio junto a la guitarra de Trenas, que la llevó en volandas en su temperamental cante por peteneras, seguiriyas y bulerías. Y, por último, la joven Isabel Jurado puso el cierre a la noche, dejando sobre las tablas el inconfundible eco de su maestro ‘El Pele’ en la soleá por bulerías, un cante por seguiriyas y las cantiñas que interpretó junto a la joven guitarra del talentoso David Caro.

La entrega de diplomas para los finalistas y la presencia del flamencólogo Agustín Gómez para hacer entrega del premio de seiscientos euros y una actuación en ‘El Rincón del Cante’ al ganador, resultó el colofón de una noche en la que la nota de color la puso la joven concursante Alba María Salinas, que a sus diez años de edad recibió una mención especial del jurado por el desparpajo demostrado en la previa del certamen y volvió a hacer las delicias del público con su cante en el receso previo al fallo del jurado.

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