VIDEO: CARMEN LINARES CANTA A JUAN RAMÓN JIMÉNEZ
‘La Dama del cante’, la que lleva más de dos décadas entregando su privilegiado metal a los versos de los grandes de la poesía española, fue la encargada de inaugurar oficialmente la novena edición de Cosmopoética en el Teatro Góngora. Carmen Linares presentaba en esta ocasión ‘Remembranzas’, un espectáculo que lleva el mismo título que su último disco, pero en el que recreó un compendio de poemas de Juan Ramón Jiménez, Miguel Hernández y Federico García Lorca rescatados muchos de ellos de anteriores trabajos.
Aforo completo en el patio de butacas para disfrutar de una artista excepcional, que llena escenarios con su sola presencia y que es admirada y respetada por un público que transciende al aficionado flamenco. El espectáculo de la jiennese, que hace apenas una semana cantaba también a los poetas en la Bienal de Flamenco de Sevilla con su ‘Oasis abierto’, fue de menos a más. Acompañada de guitarra y palmas, dio comienzo a su actuación interpretando a compás de bulerías y alegrías poemas como ‘Llanto’ o ‘Remembranzas’ de Juan Ramón Jiménez.
Quizá fuera por la dificultad en la adaptación del poeta onubense o por la frialdad inicial del auditorio, pero lo cierto es que no fue hasta la segunda parte cuando la señora del cante ofreció lo mejor que lleva dentro. Ya a solas con el piano de Pablo Maldonado, recitó a Hernández entonando los versos de ‘El niño yuntero’ y ‘Casida del Sediento’. Lo hizo con una malagueña que remató por rondeña y una balada respectivamente. Y continuó su homenaje al poeta alicantino recreando una copla con música de Luis Pastor y letra del poema ‘Mis ojos sin tus ojos’.
Habrá quien discuta la flamencura del espectáculo o la acertada adaptación de los versos de la jiennese, sobre todo a la vista del resultado cosechado por el malogrado Enrique Morente en similar faena, pero lo que resulta irreprochable es la entrega y sabiduría que demuestra Carmen Linares en cada cante que interpreta. Continuó por toná y debla, y con una granaína que remató por rondeña recitó ‘Vuelta de paseo’ de García Lorca, del que rescató versos de sus obras ‘Poeta en Nueva York’ y ‘Romancero gitano’ para la última parte de su espectáculo. Y así, cuando el duende comenzaba a desperezarse al son de los versos del ‘Anda jaleo’ que compuso el poeta más jondo, la cantaora se despidió de un público agradecido al que le queda por delante toda una semana para disfrutar del encuentro de poetas más prestigioso de Europa.