Texto: Alejandro Medina. Fotos: Óscar Romero.
Apariencias, el nuevo proyecto de la bailaora Eva Yerbabuena estrenado este año en el Festival de Jerez y presentado el pasado lunes en la Bienal de Flamenco de Sevilla, acumula lo más denso al principio, cuando contemplamos una danza rudimentaria interpretada por la granadina con la voz brillante, sutil y penetrante de Alana Sinkëy –un delicioso descubrimiento-.
Pero este principio nos angustia: la obra comienza ensimismada, retórica, apabullante. El escenario se llena de estímulos y nos cuesta repartir nuestra atención. No obstante, a partir de la petenera el tono se va relajando –siendo por lo general grave-, la obra se concentra y el espectáculo inicia un in crescendo que culminará en la soleá.
Tras la petenera, Eva desaparece por un largo trecho del escenario. Durante su ausencia, acrecientan su importancia los elementos centrales del arte de Eva la Yerbabuena: un excelente cuadro de baile, la austeridad en las músicas (únicamente Paco Jarana a la guitarra y Antonio Coronel con la percusión) y dos cantaores extraordinarios, Alfredo Tejada y José Valencia. Mención especial merece el lebrijano, que estuvo descomunal, libérrimo durante toda la actuación, trasportando intacta la excelencia de su cante de la vanguardia a las expresiones más arcanas. Todos juntos van aumentando la carga flamenca del espectáculo, que se va tornando más convencional.
Con algunos cambios respecto al programa de mano, vuelve Eva con traje flamenco para bailar los pregones a compás de tangos. Se abre así el periodo condescendiente de Apariencias, que astutamente reserva para el tramo final una verdadera apoteosis.
Cuando Eva cede a nuestro deseo y nos descarga de la excesiva significación, su baile alcanza la máxima trascendencia. La expresión compungida con la que nos ha escamoteado este momento de gozo se desvanece, y vivimos un instante pleno, emocionantísimo, con Eva bailando por soleá de manera inolvidable.
Para cerrar bulerías arromanzás rodeada de sus cantaores fetiche, que se sumaron por sorpresa a la coda final: Segundo Falcón, David Lagos, Enrique el Extremeño, José Valencia, Alfredo Tejada, Moi de Morón y Jeromo Segura. Atrás quedan las cábalas, la incomprensión, la distancia. Nadie lo hubiera dicho al principio.
Hay un error en la información del artículo. El espectáculo no se ha estrenado en la Bienal, sino en el pasado Festival de Jerez.
Tienes razón, Rocío. Muchas gracias por la rectificación. Saludos!!