La Cátedra de Flamencología de Córdoba celebró el pasado sábado en el Gran Teatro su tradicional gala navideña con un espectáculo en el que los jóvenes talentos fueron los protagonistas y que sirvió para cerrar la programación flamenca del presente año.
La malagueña Virginia Gámez fue la encargada de abrir la noche con un recital de cante en el que estuvo acompañada por la magistral sonanta del cordobés Manuel Silveria. Malagueña, tientos-tangos, granaína y alegrías fueron los cantes del repertorio de esta malagueña, que dejó muy buenas sensaciones con su reposado cante y su excepcional técnica vocal.
El baile corrió a cargo de La Choni, que volvió a ensalzar la estética de la escuela sevillana con una virtuosa interpretación de la caña, tras la cual dio paso a uno de los cantaores más prometedores del momento.
Bernardo Miranda llegaba invitado a la Gala de la Cátedra de Flamencología tras recibir el I Premio ‘Agustín Gómez’ de Flamenco del Ateneo de Córdoba, un galardón que se suma a una larga lista de reconocimientos entre los que se encuentra también el I Premio en la Modalidad de Cante del Certamen Andaluz de Jóvenes Flamencos ‘Desencaja’ 2012. Acompañado por la musicalidad de Silveria y la flamencura del viento metal de su paisano Juan Diego Sáez, el joven cantaor de Fernán Núñez volvió a demostrar la enorme proyección que atesora su cante. Un hecho que el público no dudó en reconocer con un sonoro aplauso.
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