Una decena de vestidos componen la colección que Javier León presenta este año en We love Flamenco, unos diseños inspirados en la década de los 80, en su estilo desenfadado y en su catarsis de color.
La flamenca de ‘A mí, plin’ hace gala a una de las décadas más excesivas, que supuso toda una revolución en el mundo de la moda, valiéndose de descaradas hombreras, efectos metalizados, proporciones voluptuosas y mezcla de texturas en los tejidos.
El diseñador viaja 30 años atrás, para abrirse a una rica y viva gama cromática donde el negro es el gran protagonista, deteniéndose en tonos fuertes como rosas, rojos y naranjas.
Fotos: Chema Soler.