Curro Lucena es uno de esos cantaores que ha contribuido, desde que se fuera a Madrid con apenas veinte años, a dignificar el flamenco al igual que lo hicieron otros de su generación como Enrique Morente, Carmen Linares o José Menese.
Ahora, ya afincado en Ronda -ciudad que lo nombró el pasado mes de mayo Hijo Adoptivo- y tras más de cuarenta años paseando su arte por los escenarios de España y el resto del mundo, la Cátedra de Flamencología de Jerez le ha otorgado el Premio Nacional a la Mejor Discografía de Flamenco, una institución que reconocerá de esta manera el próximo mes de julio el trabajo de toda una vida dedicada al cante.
“Me siento muy orgullo y contento por este premio, sobre todo cuando ahora se cumplen cuarenta años de mi actuación en el Teatro Español de Madrid con motivo de la entrega de estos mismos galardones”, recuerda el cantaor. Y es que su participación en la mencionada gala fue la que le consagró a la vista de críticos y entendidos de la época, lo que inevitablemente se convirtió en un punto de inflexión en su carrera artística.
Con veinte años Curro Lucena abandonó su profesión de zapatero en Lucena para marcharse a Madrid. “Yo no quería zapatos, lo que quería era cante”, comenta. En la capital, comienza a introducirse en el ambiente flamenco de la época trabajando en los Tablaos Zambra y Las Cuevas de Nemesio. Y allí tuvo la oportunidad de entablar relación con figuras de la talla de Juan Varea, Rafael Romero ‘El Gallina’, Pepe ‘El Culata’, Rosa Durán, Miguel Vargas, la bailaora cordobesa ‘La Tomata’, Perico ‘El del Lunar’ o Andrés Heredia.
De aquella época, en la década de los setenta, datan sus primeros discos, que suman un total de diez publicaciones, y también su primer gran reconocimiento, el Primer Premio por Malagueñas y Cantes de Levante de Mairena del Alcor, en 1972. Años más tarde, también logró hacerse con otro de los galardones más señeros del circuito flamenco, la Lámpara Minera de La Unión, que consiguió en1985.
Junto al cantaor lucentino, el resto de galardonados por la Cátedra de Flamencología de Jerez el próximo mes de julio serán: Manuel de los Santos “Agujeta de Jerez”, Premio de Honor a la Maestría; José de la Tomasa, Premio Nacional de Cante; Sara Baras, Premio Nacional de Baile; Antonio Higuero, Premio Nacional de Guitarra; la Fundación Cristina Heeren de Arte Flamenco, Premio Nacional de Enseñanza Flamenca; el fotógrafo Miguel Angel González, Premio Nacional a las Artes Plásticas; Juan Vergillos, Premio Nacional a la Crítica Flamenca; el Colegio Mayor Universitario Isabel de España, de Madrid, Premio Nacional a la Divulgación del Flamenco; y, finalmente, el Premio Nacional a la Promoción del Flamenco, a la Peña “Al Andalus”, de Amberes (Bélgica).