La Macanita, pura gitanería de Santiago

 

 

 

 

 

 

 

 

Una actuación en la que la hija de El Macano estuvo cómoda, rodeada de artistas ya conocidos en sus recitales y durante la que -como también es habitual en el trabajo de la cantaora- hubo momentos para recordar a los grandes “que queremos tanto y se nos han ido”. Grandes como Chocolate o Fernando Terremoto, que estuvieron presentes en las bulerías ‘Cobre viejo’ y los tangos ‘Déjame volar’, dos de los mejores temas de la noche.

Con ‘De Santiago’, La Macanita ofreció un recorrido por diferentes palos flamencos rescatando los más exitosos de sus discos y, si bien en la primera parte del espectáculo su cante fue más jondo, con los temas más populares de la segunda mitad el cante de la jerezana creció y llegó al público.

Con todo, La Macanita estuvo soberbia con la seguiriya de la primera mitad, que protagonizó el momento más íntimo y emotivo de la noche. Pero el solo de la guitarra de Manuel Valencia sirvió de puente para pasar de la dulzura, la pausa y el sentimiento a la alegría, la fuerza y el grito salvaje.

Los contrastes de la voz gitana de Tomasa se disfrutaron en las bulerías que interpretó paseándose por el escenario, así como la fuerza y el compás del elenco en los tangos que la artista cantó acompañada de la dulce voz de Leli Soto.

Siempre es un placer escuchar unas alegrías de Cádiz de un cuadro flamenco como el de anoche, con las palmas de Chicharito, Macano y El Bo, la percusión de Luis de Periquín y la guitarra cómplice de Valencia. Y siempre es un placer escuchar los contrastes y el ritmo de La Macanita, que, si bien es cierto que en todos los palos no brilla, en los propios de su tierra deslumbra.

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